La violencia se emplea con la finalidad de conseguir unos objetivos determinados. Generalmente, los actos violentos están motivados por sentimientos como la ira, la envidia, la desesperación, el odio, etc. Además, existen distintos tipos de violencia que se utilizan según los objetivos que persiga la persona en cuestión. Es por ello por lo que, a lo largo de este artículo, hablaremos sobre qué es la violencia, qué tipos existen y las consecuencias que cada uno. Y recuerda que en nuestra escuela puedes estudiar el máster en prevención de la violencia de género. A través de su programa formativo profundizarás tus conocimientos en políticas de género y medidas de prevención de la violencia hacia la mujer.
Índice de contenidos
¿Qué es la violencia?
La violencia se defe como el uso de la fuerza física o verbal hacia una persona para conseguir algo o imponer una conducta. Los comportamientos violentos que se emplean pueden:
- Involucrar la fuerza física con el objetivo de dañar a alguien
- Acciones verbales o gestuales para rebajar o infravalorar a alguien
- Emplear el silencio para despreciar a alguien.
Es cierto que la violencia no se emplea de la misma manera en todo el mundo, pues su significado varía, sobre todo, por factores culturales. Existen actos que en un país se considerarán violencia, mientras que en otros, según su cultura, ética y moral, no.
¿Cuántos tipos de violencia hay y cuáles son?
Hemos visto que la violencia no solo se emplea de una manera en concreto, sino que son bastantes los actos que se pueden considerar violencia. Veamos los cinco tipos más comunes:
La violencia física
Seguramente es el acto más común y el primero que se nos viene a la cabeza cuando hablamos de violencia. Sucede cuando una persona daña a otra físicamente, tanto con el cuerpo como con instrumentos (cuchillos, objetos rígidos…) Aunque no tiene por qué dejar siempre heridas visibles, suele hacerlo.
Violencia psicológica
Este tipo de violencia es el más difícil de detectar, ya que no es igual de visible que una herida o un golpe. Son muchos los actos que pueden considerarse violencia psicológica, como puede ser la intimidación, la manipulación, las amenazas… De hecho, se trata de cualquier conducta que pueda afectar a la salud mental de una persona. En algunos casos, los efectos de este tipo de violencia son irreversibles.
Violencia sexual
La violencia sexual engloba todo acto sexual, físico o verbal, no consentido ni deseado por la otra persona. En esta forma de violencia, la mayoría de víctimas son mujeres y los agresores, hombres. Se suele emplear la violencia física y psicológica para reducir a la víctima y poder llevar a cabo el acto sexual contra su voluntad.
Violencia económica
Sucede cuando se utiliza el dinero para establecer relaciones de poder que perjudican a la otra persona. Se suele manifestar quitando el dinero que gana una persona o impidiendo que se lo gaste, de manera que la víctima no puede ser independiente, pues está sometida a un control financiero constante y amenazas continuas.
Violencia de género
Hace referencia a todos aquellos actos violentos contra una persona por su sexo o su orientación sexual. En varios casos, los hombres ejercen este acto contra las mujeres por el control que creen tener sobre ellas, demostrándoles desigualdad y poder. Igualmente, también puede suceder con personas homosexuales o transexuales por no ser aceptados socialmente.
Formarse en prevención de la violencia
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- Acompañamiento en situaciones de violencia contra las mujeres.
- La teoría del género y del lenguaje no sexista.
- La identificación y tratamiento de imágenes.
- La detección de la violencia de género.
- Los procesos de atención a mujeres en situaciones violentas.
- Actuaciones en diferentes contextos de intervención.
- Análisis de la información desde la perspectiva de género.
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